Entradas

Mostrando entradas de 2010

La clave eucariota

Imagen
En su magnífico libro Los diez grandes inventos de la evolución (ed. Ariel) el bioquímico británico Nick Lane plantea una lista de los que, a su juicio, son los hitos más importantes de la historia de la vida en nuestro planeta, ordenados más o menos según tuvieron lugar a lo largo de su evolución desde que surgió hasta la constitución de la conciencia. Entre ellos, la aparición de la célula eucariota es quizá el hecho más relevante, porque a partir de él se hicieron posibles los “inventos” sucesivos; un acontecimiento crucial que dio lugar a todo un amplio dominio taxonómico, Eukarya, al que pertenecemos todas las formas de vida compleja, animales plantas y hongos, además de los protistas. El feliz suceso ocurrió hace unos 2.000 millones de años según parece, y lo hizo sólo una vez, de forma que todos los integrantes del grupo estamos indudablemente relacionados con el mismo antepasado común, una célula ancestral dotada de unas características muy especiales y totalmente novedosas res

Seleccionado el primer Grupo de Discusión europeo para el Instituto de Astrobiología de la NASA

Imagen
El Consejo Ejecutivo del Instituto de Astrobiología de la N.A.S.A. (N.A.I. por sus siglas en inglés) ha seleccionado la propuesta del investigador español Javier Martín-Torres, del Centro de Astrobiología (C.A.B. adscrito al Centro Superior de Investigaciones Científicas y al Instituto de Técnica Aeroespacial I.N.T.A) de incorporar a su organigrama un Grupo de Discusión (Focus Group) dedicado a Termodinámica, Desequilibrio y Evolución TDE , que será el undécimo de los integrados en el N.A.I., y el primero en serlo de los propuestos por científicos no estadounidenses. Los Grupos de Discusión son equipos de trabajo dedicados a estudiar determinados asuntos que el N.A.I. considera de especial relevancia para el avance en el campo de la astrobiología, y concretamente el grupo de Martín-Torres se ocupará de servir de plataforma de coordinación entre investigadores centrados en aspectos teóricos y experimentales sobre el origen de la vida y de los que trabajan en la planificación y desarroll

La impertinente noción de progreso evolutivo

Imagen
En el entendimiento general es normal la creencia de que la vida, desde que surgió en nuestro planeta, ha ido pasando desde sus manifestaciones bacterianas iniciales más sencillas hasta los mamíferos, con el hombre a la cabeza como culmen de la evolución hasta la fecha, en una proyección orientada siempre hacia el incremento progresivo de la complejidad de sus formas. Este relato es, además de excesivamente simplista, básicamente erróneo, como puede comprobarse en un análisis detenido de la historia de la vida, tarea que ocupó una buena parte de los trabajos del famoso paleontólogo Stephen Jay Gould, combativo detractor de la idea de progreso evolutivo. La vida surgió sobre la Tierra casi inmediatamente después de su formación, hace al menos 3.600 millones de años (probablemente antes) lo que sugiere que es una consecuencia necesaria de las leyes físicas que rigen la dinámica de la materia, y lo hizo, como no podía ser de otro modo, en su forma más simple. La vida compleja pluricelular

fotosíntesis extraterrestre

Imagen
La búsqueda de vida en otros lugares del universo, tanto en nuestro sistema solar como en lejanos sistemas planetarios, de los que ya hay disponible un amplio, si bien poco definido catálogo, ha cobrado en los últimos años una gran relevancia, impulsando el auge que va adquiriendo la astrobiología como disciplina científica puntera. Las próximas misiones Exo Mars tendrán como objetivo primario detectar evidencias de vida en Marte; el futuro proyecto Darwin de la E.S.A., un conjunto de tres telescopios espaciales cuya puesta en órbita está prevista para 2014, ha sido diseñado para buscar planetas similares al nuestro en otros sistemas y detectar signos de vida en ellos, y el Telescopio Extremadamente Grande que construirá el Observatorio Europeo Austral en el desierto de Atacama, en Chile, contará también entre sus tareas con la de localización y caracterización de planetas “terrestres” situados en la zona habitable de sus respectivas estrellas. El convencimiento de que la vida debe est

Cambio climático; últimas noticias

Imagen
Al margen de la enconada controversia mantenida por diversos sectores sociales y políticos en torno al asunto del calentamiento global, en la que los argumentos, incluida la interpretación de datos científicos, se ven deformados hasta lo grotesco, y aparte del extremismo desenfocado que han llegado a adoptar las posturas enfrentadas y de la deficiente comprensión que el público en general tiene del tema (cualquier fenómeno meteorológico, sea local o global, e incluso otros eventos de naturaleza geológica que nada tienen que ver con la atmósfera se achacan directamente al “cambio climático”), parece cada vez más cierta la posibilidad de que la actividad humana esté alterando el delicado equilibrio físico-químico de la atmósfera, y precipitando en consecuencia ese susodicho y temido cambio climático que, por lo demás, no sería el primero, ni será, de verificarse, el último sufrido por nuestro planeta. A lo largo de su historia, se han producido varios de ellos, como las glaciaciones, alg

La vida y la segunda ley

Imagen
La vida es considerada todavía en ciertos sectores científicos como un fenómeno excepcional con el que ha sido distinguida la Tierra entre todos los planetas gracias a sus condiciones específicas. Peter D. Ward es una notable figura de esta tendencia, plasmada en su teoría de la Tierra Especial o Tierra Rara, en la que defiende que la vida surgió en nuestro planeta como consecuencia de una sucesión de hechos altamente improbable, y de la concurrencia de unas circunstancias tan precisas que su repetición sería prácticamente imposible. No obstante, parece que se va imponiendo una concepción de la vida como mero fenómeno físico regido por leyes naturales con vigencia universal, y sobre ella se asientan las más aceptadas hipótesis que tratan de explicar su inicio. La termodinámica ha contribuido notablemente a describir los fundamentos físicos de los procesos que dieron lugar a las primeras estructuras vivas, y ha conseguido componer un esquema más o menos nítido de por donde discurrieron.

La segunda génesis

Imagen
Ante la inmensa variedad de especies de todos los reinos de la vida que pueblan en la actualidad la Tierra, es difícil imaginarse la subyacente unidad que las vincula a todas (incluida la nuestra por supuesto) desde sus mismos orígenes. Nadie sabe ni por aproximación cuántas especies existen sobre el planeta. Las conocidas no llegan a los dos millones, pero los científicos son unánimes en que el censo disponible es muy pobre, y representa una porción relativamente pequeña del total. Las estimaciones sobre el número real son dispares, pero las más prudentes cifran en 15 millones las especies vivas, aventurándose algunos hasta los 50 millones. Sea el número que sea, supone apenas el 1 por ciento de las especies que han existido desde que se originó la vida. Pues bien, esta mareante cantidad de criaturas constituye el linaje de un único organismo originario, un único individuo a partir del cual, a lo largo de miles de millones de años de variación evolutiva hemos surgido todos los seres p